Significa retirar la carta superior de la baraja y colocarla boca abajo en un montón de descarte antes de repartir las cartas comunitarias. El objetivo principal de quemar una carta es evitar cualquier posibilidad de hacer trampas o marcar las cartas. Asegura que ningún jugador conozca la identidad de la siguiente carta que se repartirá, manteniendo así la integridad del juego. Normalmente, se usa una carta quemada antes de repartir el flop, el turn y el river. Antes de cada una de estas rondas, se quema una carta para garantizar que la siguiente carta repartida sea desconocida para los jugadores.